lunes, 4 de mayo de 2009

MARIO ABECEDARIO (Cap. 1).- A partir de 7 años


1.- El comienzo de todo

— ¡Buenos días mamá, ya estoy despierto! ¿Mami?, ¡que ya estoy despiertooooooo! En fin, nadie me oye, parece que todos están durmiendo: mi padre, mi madre y mi hermana Ana.
Soy Mario y tengo seis años. Todos me llaman Mario Abecedario aunque ése no es mi verdadero nombre, en realidad me llamo Mario García Jiménez. ¿Que por qué todos me llaman así? Veréis, cuando era pequeño (lo aclaro porque ahora ya soy mayor), creo que tenía dos años o así, mi hermana Ana se tenía que aprender el alfabeto y se pasaba el día andando por los pasillos de mi casa recitándolo en voz alta, ¡qué pesada oye!, a mí no me dejaba dormir. Un día, cuando estábamos comiendo en la cocina toda la familia, mi madre le dijo a mi hermana: “Venga Ana, dinos el abecedario a ver si lo recuerdas”. Entonces mi hermana empezó a jugar con la comida haciéndose la remolona y yo me quité el chupete y lo recité enterito, de la A a la Z, no se me olvidaron ni la M, ni la T, ni ninguna letra. Mis padres se quedaron pasmados y mi hermana también.
— ¿Cómo es posible que un niño tan pequeño se aprenda el abecedario? —exclamó mi madre con las manos en la cabeza.
— ¡Este niño es superdotado! — contestó mi padre.
Y mi hermana, mi pobre hermana, que llevaba una semana entera estudiándolo, se puso a llorar.
Y esa es mi historia, desde entonces en casa me empezaron a llamar Mario Abecedario y ahora todos me conocen así. A mí me gusta mucho, aunque para que lo sepáis no soy ningún superdotado, de hecho aquella fue mi primera y última hazaña.